Las pigmentaciones o manchas en la piel pueden ser de distinta naturaleza y corresponder a procesos muy diversos. Pueden ser provocados por daño solar crónico como los léntigos simples (manchas de la edad) o la poikilodermia , como consecuencia de quemadura solar como los léntigos solares, como respuesta a estímulos hormonales como el melasma o cloasma, como consecuencia de una inflamación previa (herida, enfermedad) como la pigmentación postinflamatoria, como consecuencia de una alteración en el desarrollo como el nevus de Becker, el nevus de Ota, las manchas “cafe con leche”, como consecuencia de una lesión tumoral benigna como los nevus melanocíticos (lunares) o las queratosis o maligna como el melanoma, etc
En la Clínica establecemos el diagnóstico dermatológico correcto del tipo de mancha. En los casos con abundantes nevus melanocíticos o con nevus atípicos o con sospecha de posible melanoma aconsejamos el estudio dermatoscópico con “Fotofinder Dermoscope” para su correcto diagnóstico y seguimiento.
Para las “manchas” benignas podemos optar por técnicas distintas a la cirugía extirpativa y en la Clínica disponemos de las siguientes técnicas:
- BBL
- Fotofacial IPL
- Q-switched KTP
- Q-switched Nd-YAG
- Microlaserpeel
- Resurfacing ablativo
- Resurfacing fraccional ablativo
- Resurfacing fraccional no ablativo