LÉNTIGO
La aparición de manchas marrones sobre la piel puede ser de muy diversa naturaleza, desde nevus, melasma, léntigos etc. Para poder tratarla adecuadamente, previamente el dermatólogo deberá realizar el diagnóstico correcto pues según la naturaleza de cada mancha será más adecuado un tipo u otro de tratamiento, pudiendo ocurrir en algunos casos de que ciertos tratamientos estén contraindicados.
El léntigo es un mancha marrón provocada por exceso de melanocitos en la epidermis, puede ser de origen familiar, incluso formando parte de ciertos síndromes, de origen solar por quemadura o por daño solar crónico o como respuesta algún otro tipo de agresión. El léntigo solar es extremadamente frecuente en la raza blanca en las zonas expuestas al sol, afectando a más del 75% de los mayores de 60 años, en ocasiones puede convertirse en léntigo maligno.
TRATAMIENTO
Los tratamientos despigmentantes con cremas o peelings son decepcionantes en la gran mayoría de los casos. En la clínica usamos láseres para su eliminación pues se ha demostrado como la técnica más eficaz sin comparación: láser de Q-switched, láser de erbio, láser 1540 (Erbio-glass) o luz pulsada como el BBL.
En general para los léntigos definidos elegimos entre el láser Q-switched o el BBL, pero en ciertos pacientes con abundante daño solar y manchas mal definidas preferimos optar por el BBL o un “resurfacing” fraccional con Erbio o fraccional con láser 1540.
OTRAS PIGMENTACIONES
Para el tratamiento del nevus de Ota o el nevus de Becker optamos por el Q-switched. En el caso del melasma barajamos la opción de tratamiento químico junto quizá bajas dosis de BBL o Q-switched o junto al láser 1540. Si la pigmentación es postinflamatoria solemos tratarla con BBL y sin embargo si es de hemosiderina con el Q-switched. En cualquier caso las opciones terapéuticas surgen cuando se estudia el caso en toda su magnitud.