Parálisis Facial
La parálisis facial central o periférica, provoca asimetría facial mas o menos llamativa por hipotonia de algunos músculos por su falta de inervación y por la acción compensatoria de otros músculos o del lado contralateral de la cara. Puede ser como consecuencia de accidentes, enfermedades neurológicas o de causa desconocida.
Esta llamativa deformidad facial puede corregirse con el uso de sustancias que relajan los músculos faciales como la toxina botulinica. El procedimiento no requiere anestesia. Se inyecta la sustancia con una microaguja en el músculo que queremos relajar. Los resultados de esta técnica se empiezan a observar a partir de las 48 horas posteriores al tratamiento y sus efectos duran entre 4-6 meses.
El valor añadido que aporta un profesional experimentado en el uso del Botox consiste en:
-Conocer al detalle la anatomía humana y sus variantes para poder valorar bien que músculo y con que dosis ha de tratarse
-Conocer bien los mecanismos de compensación de movimientos y del tono de la musculatura facial.