Tratamientos con Plasma Enriquecido en Factores de Crecimiento
El tratamiento con Plasma Rico en Factores de Crecimiento (PRFC) es una novedosa técnica que permite aislar y utilizar los factores de crecimiento (proteínas) presentes en la sangre del propio paciente para potenciar, acelerar y estimular la regeneración de los tejidos.
Es un tratamiento natural que se basa en aprovechar nuestra propia capacidad de regenerar tejidos. Cuando sufrimos una herida son las plaquetas de la sangre las que desencadenan el proceso de reparación. Podemos obtener los factores de crecimiento desde la sangre para mejorar el estado de nuestra piel.
Para la obtención del Plasma Rico en Factores de Crecimiento se realiza una extracción de un pequeño volumen de sangre del paciente y se separan las fracciones plasmáticas mediante centrifugación controlada. A continuación, se puede inyectar el “Plasma Rico en Factores de Crecimiento” en la piel de cara, escote, cuello y dorso de las manos para estimular su regeneración. Una vez finalizado el tratamiento se puede volver a retomar la actividad normal inmediatamente. También se puede utilizar en el cuero cabelludo con el fin de regenerar folñiculos pilosos.
El PRGF es un tratamiento que se puede aplicar a partir de los 35 años a nivel preventivo, para ralentizar el proceso de envejecimiento, y a partir de los 45 años con fines regenerativos y correctivos, en el caso de alopecias cuando se presente el problema. Solamente se aplica en la zona a tratar una pomada anestésica o frío local antes de iniciar la sesión para evitar las molestias de las infiltraciones.
El número de sesiones y su periodicidad dependen del grado de envejecimiento de la piel o del tipo de alopecia presente, pero normalmente se recomienda someterse a entre 3 y 4 sesiones el primer año y continuar el tratamiento de mantenimiento con dos sesiones anuales durante los siguientes años. Tenga en cuenta que el envejecimiento es algo evolutivo y con este tratamientos estamos ayudando a la piel a reparar sus daños.